Este informe está escrito por un progresista consistente, lo que significa una persona cuyo valor principal es la verdad, nada más que el 100% de honestidad y que refleja solo fuentes verificadas personalmente, hechos reales.El informe está escrito solo porque informa lo que mis propias investigaciones independientes han encontrado que es el caso real con respecto a lo que ahora se llama comúnmente "Ukrainegate" (el foco de los procedimientos de juicio político contra el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump).
El Informe PISA de 2018 suponía el certificado de defunción de la enseñanza en España. El diario El País, prefería ver el vaso medio lleno y afirmaba: “La educación española se atasca en ciencias y matemáticas, pero mejora en lectura”. Se le olvidaba explicar que las ciencias y las matemáticas, hoy, suponen el futuro y que, sin mejorar en esas áreas, España quedará en esa posición periférica, muy alejada de los centros mundiales en los que se elabora el futuro, implicada en actividades de escaso valor añadido y, como país de servicios, más que como potencia científica e industrial.
A lo largo de la historia, el colapso de las grandes potencias de cada época coincidía justo, en un tiempo histórico donde creían que eran invencibles, lo creían justo antes de su desastrosa caída que denominan Reestructuración (Perestroika) integral sistémica.
Para entender lo que sucede, no basta con saber que todos mienten. Hay que descubrir lo que cada cual trata de esconder y reconocerlo, incluso cuando se comprueba que aquellos a quienes admirábamos eran en realidad detestables.
En la forma en que existe hoy, la geopolítica es sin duda una ciencia mundana, "profana" y secularizada. Sin embargo, entre todas las otras ciencias modernas, es la geopolítica la que ha preservado la mayor conexión con la Tradición y las ciencias tradicionales. René Guénon dijo que la química moderna es el producto de la desacralización de la ciencia tradicional de la alquimia, así como la física moderna tiene su origen en la magia. Exactamente de la misma manera, se podría decir que la geopolítica moderna es el producto de la secularización y desacralización de otra ciencia tradicional, la de la geografía sagrada.
Comprender la ferocidad de los ataques contra Donald Trump y nuestra Constitución puede parecer solo un rasguño. ¿Se debe realmente a los partidarios de Barack Obama y Hillary en los niveles más altos del Departamento de Justicia, conspirando con un grupo de millennials políticamente correctos y sabelotodos en los medios de comunicación, el meme favorecido por ¿Fox News? Si es así, ¿por qué no se defiende más eficazmente al presidente?
Ningún conocimiento tiene carácter definitivo. La Historia, como cualquier otra ciencia, es un constante cuestionamiento de lo que en algún momento creímos cierto, hasta que nuevos elementos vienen a modificar esa convicción, y quizás a contradecirla totalmente.
La apocalíptica comparecencia de Greta Thunberg ante la ONU ha vuelto a poner de manifiesto el marcado tono alarmista del activismo climático escorado a la izquierda. En este sentido, podría decirse que la intervención de la joven sueca no supone ninguna novedad: las predicciones climáticas apocalípticas llevan sucediéndose cientos de años y han sido especialmente recurrentes durante el último medio siglo.